Un joven riosecano crea la primera Escuela de Artes Marciales

Nacho Pizarro lo tiene muy claro cuando le preguntan por cuatro razones para practicar kárate: “Uno, para adquirir concentración; dos, para fomentar el respeto y la educación; tres para ganar en seguridad y confianza y cuatro, para mejorar la condición física”. Su afición por este tipo de deportes, del cual es un gran conocedor y su interés porque en Rioseco se pueda practicar con mayor asiduidad, le han llevado a crear la primera escuela de Artes Marciales de la localidad.

Bajo el nombre de Kuro Obi (que significa cinturón negro) este centro situado en la calle Ventura García Escobar 8 (junto al Torno) ofrece kárate infantil y de adultos, goshin (defensa personal), tai chi y yoga. “Llevo practicando el kárate desde los 8 años, es un mundo que siempre me ha gustado, para lo cual he entrenado y me he formado y desde hace tiempo llevo dando clases por toda la comarca”, dice Nacho Pizarro, cinturón negro segundo dan, quien estudió la idea de abrir un centro en Rioseco y lo vio «viable”.

Como es monitor de kárate titulado por la Federación de Castilla y León, Pizarro puede examinar a sus alumnos (todos ellos federados) para ir subiendo de nivel, algo que se simboliza en el color del cinturón: blanco, amarillo, naranja, verde, azul, marrón y negro. Además de kárate y defensa personal: “el kárate aplicado en la calle”, tal y como asegura Nacho, los interesados en otras técnicas de relajación podrán disfrutar de tai chi y de yoga, impartido por dos especialistas.

“En Rioseco aún no existe cultura de artes marciales”, dice Pizarro, quien pretende en el próximo mes “organizar una exhibición de diferentes modalidades”. Si el proyecto funciona y la gente de la localidad y de la comarca responde poco a poco la Escuela de Artes Marciales Kuro Obi de Medina de Rioseco podrá ir creciendo con nuevas ofertas: “Me gustaría poder incluir pilates, gimnasia de mantenimiento e incluso Kung-fu, que es algo así como más exótico”, dice el entrenador, tras concluir una clase en el tatami que él mismo ha construido, para la práctica de este tipo de deportes que para nada son violentos, concluye.

Los niños desde los 4 hasta los 13 años pueden optar por el kárate infantil, por una cuota mensual de 30 euros en la que se incluyen clases de una hora durante tres días a la semana. La escuela Kuro Obi ofrece kárate de adultos (a partir de 13 años), tres días a la semana (40 euros). La defensa personal se imparte en dos horas semanales con una cuota de 30 euros, al igual que el tai chi y el yoga. Para más información se pude contactar en el teléfono 666089804.