El 24 y 25 de noviembre alumnos de 3º y 4º de ESO del IES Campos y Torozos acudieron a Valladolid para presenciar dos representaciones teatrales bien distintas. Aunque han coincidido en el tiempo, ambas visitas no tienen nada que ver.
La primera, la del 24 de noviembre, iba dirigida a alumnos de 3º de ESO y estaba organizada por el Departamento de Lengua castellana y Literatura. Acudieron a la representación de La dama boba de Lope de Vega, una de las comedias de enredo más divertidas de este insigne autor. Finea consigue la lucidez intelectual gracias a su enamoramiento, pero tiene que hacerse de nuevo la tonta para poder salirse con la suya y casarse con quien quiere. Tras la representación se produjo una charla coloquio con los actores, que agradecieron el buen comportamiento de todos los asistentes.
Más tarde, tras la obra, acudieron a la Casa Zorrilla para realizar una visita guiada tanto del edificio como de la biblioteca. Así, los alumnos pudieron conocer muchos detalles interesantes sobre la vida del autor vallisoletano, que recibió en vida el gran reconocimiento de ver un teatro con su nombre en la ciudad que le vio nacer. Tuvo otros muchos reconocimientos a nivel nacional, como un homenaje en Granada, y en su casa queda memoria de todo ello.
La representación del 25 de noviembre estaba organizada por la Diputación de Valladolid y se inscribe dentro del V Plan de igualdad de oportunidades y contra la violencia de género 2014-2018. También se desarrolló en el Teatro Zorrilla de la capital.
Con el título Te amo, tu amo, se representó una historia basada en hechos reales de malos tratos entre adolescentes que logró emocionar al público. La historia de los jóvenes Marina y Edu repite los comportamientos de los padres del chico y deja aislada a Marina en su entorno inmediato. Como vemos una historia que desgraciadamente se repite con demasiada frecuencia fuera de los escenarios.
A esta representación estaban invitados los alumnos de 4º de ESO del centro, que acudieron con la coordinadora de convivencia, Teresa Burgueño. «Es un tipo de actividad muy necesaria dado el tipo de problema que pretende combatir. Y, seguramente, los alumnos de 15 y 16 años sean a los que más puede influir ya que están en una edad crítica para comprender el problema e intentar atajarlo antes de que se produzca», explicaron desde el instituto.