En la etapa de la Educación Infantil, la interacción activa con el medio físico y social es clave en el proceso de aprendizaje de los alumnos. En este sentido, las salidas, tanto al entorno próximo como a lugares más alejados, suponen un importante recurso para favorecer y facilitar esa interacción del niño con el medio que le rodea y constituyen una experiencia lúdica que potencian también su fantasía.
Salidas como las que llevaron a cabo el pasado viernes los alumnos de Infantil del Colegio San Vicente de Paúl que se acercaron a Valladolid en una completa jornada que se inició por la mañana cuando los más pequeños asistieron en la Sala Borja a la representación de la obra ¡Ya no tengo miedo! en la que los actores, con sus historias, canciones y disfraces, despertaron las risas de alumnos y profesores.
Después, el autocar, llevó a los pequeños escolares al centro de ocio Indiana Bill, donde comieron y se divirtieron muchísimo saltando en las colchonetas, tirándose por los toboganes y jugando con las miles y miles de bolas. Una jornada que finalizó con el regreso a Rioseco en autocar en el que fueron muy pocos los niños que no se vieron sorprendidos por el cansancio y el sueño. Ya en casa, a todos les faltarían palabras para contar a sus padres y hermanos una experiencia que ya no olvidarán nunca.