Los muchos ciudadanos que a diario pasean por el Canal de Castilla, en su tramo más cercano a Medina de Rioseco, han mostrado su estupor, su incredulidad y su indignación con la salvaje tala de muchos de los chopos que crecen a orillas del Canal, llevada a cabo por la Confederación Hidrográfica del Duero; que ha prometido una reforestación mayor al número de ejemplares que se corten.
Fuentes cercanas a este organismo han asegurado que tras el temporal acaecido hace algunos días, donde algunos árboles se derrumbaron, la situación es peligrosa. Aunque la problemática viene de atrás. Este periódico ya publicó en febrero de 2013, la intención de la Confederación Hidrográfica del Duero de talar 500 chopos en el tramo de ocho kilómetros que separa la dársena de Rioseco con la esclusa séptima.
Ahora parece que ese proyecto se está haciendo realidad. No obstante, este periódico ha consultado con el alcalde de Rioseco, David Esteban, quien ha pedido explicaciones a la CHD. La institución que se encarga del cuidado del Canal ha comunicado que talará aquellos árboles peligroso que estén junto al propio cauce y reforestará “en breve” con ejemplares de más de ocho especies el lado externo del camino de sirga. Y lo hará en un número “muy superior” a los que corte.
Fuentes de la CHD dicen que históricamente el lado interno (el que está junto al agua) no contenía árboles, para que las caballerizas pudieran arrastra las pesadas barcas que navegaban en el Canal. Hace más de medio siglo, una concesión a Tafisa permitió la plantación de los chopos, que finalmente no fueron talados. La eliminación, ahora, responde a la peligrosidad de los árboles, muchos a punto de caer y cuyas raíces estropean el vaso del Canal, siempre según las mismas fuentes.
A pesar de la imagen agresiva que ofrece la tala (arrancando muchos de los ejemplares) desde los organismos se ha pedido tranquilidad, pues dice que en breve se reforestará la zona, aunque ya no los árboles ubicados en el interior del camino, justo al lado de la lámina de agua, sino en el exterior. Muchos ciudadanos han elevado sus quejas ante el Ayuntamiento de Rioseco y han expresado su malestar e indignación a través de redes sociales. La imagen del Canal cambiará irremediablemente en los próximos meses y habrá que esperar muchos años para que los nuevos árboles adquieran la frondosidad de los actuales.