Ponga pide la declaración BIC Inmaterial de la Pasión riosecana

“Hay una Semana Santa andaluza, una castellana y luego está la de Rioseco”. Así comenzó su ponencia el profesor de antropología de la Universidad de Valladolid y director de la Cátedra de Estudios sobre la Tradición, José Luis Alonso Ponga, en la primera de las charlas de las Jornadas de Hermandad La Escalera, hoy como ayer y como mañana. Una conferencia, muy crítica en algunos momentos, que hizo un recorrido por las costumbres asociadas al plenilunio de primavera como ritual cíclico a través de las distintas generaciones.

Aludió el profesor Ponga al peligro de “desinflar la burbuja semanasantera” por la absorción de elementos extraños o foráneos, aunque advirtió que “pervivirán aquellas Semanas Santa que verdaderamente tengan algo que transmitir, aquellas en las que las tradiciones se renueven a través del interior de los protagonistas, a través de los sentimientos”.

También hizo un pequeño recorrido por la tradición del Descencimiento, en sus vertientes de desenclavos y otras manifestaciones, en diversas semanas santas y en la historia del arte, concluyendo que “el Paso de La Escalera es uno de los puntos nucleares de la Semana Santa riosecana”.

Para concluir su intervención, que duró cerca de una hora, se refirió a la “indisoluble relación entre lo profano y lo sagrado” que tienen las celebraciones semanasanteras y no dudó en reclamar la declaración de Bien de Interés Cultural Inmaterial para la Semana Santa de Medina de Rioseco, sin duda un buen elemento distintivo para huir de la proliferación de manifestaciones que últimamente han obtenido el título de Fiesta de Interés Turístico Internacional.

Las Jornadas fueron inauguradas, tras la proyección del vídeo Momentos de ayer, de hoy y de siempre, por el presidente de la Hermandad del Descendimiento, Jesús Vicente Brezmes, que incidió en cómo se han querido dedicar en este año del 350 Aniversario de nuestro Paso a las generaciones venideras y recordó como la jornada de este sábado está dirigida especialmente a los niños cofrades con la salida -si el tiempo no lo impide- de la espectacular recreación de La Escalera en un paso para juegos infantiles. El colofón a la velada lo puso la proyección de un vídeo dedicado a los niños cofrades.