Nos envían estas fotografías (tomadas con un móvil) para alertar del peligro que sufren los padres y los alumnos que cada día acuden al colegio de San Vicente de Paúl. El motivo, las obras de un edificio colindante. «Los obreros cortan piedra sin importarles que pasen niños y se pueda caer algo encima de ellos. Enfoscan la fachada y muchos restos caen a la calle o encima de los coches». El denunciante dice que si se intenta hablar con ellos, se encaran diciendo que «a ellos no les importa». Los afectados piden una solución y más medidas de seguridad.