Crucifixión
Anónimo
Óleo sobre cobre
Procede de la iglesia de Santiago
Jesús y la Magdalena centran frontalmente la compasión; a los lados, distanciados, María y las santas mujeres, y San Juan con los apóstoles. Un guerrero a caballo en corveta destaca en la penumbra.
El cuadro representa el momento anterior a la Crucifixión con un Cristo vivo y expirante que eleva la cabeza dirigiendo la mirada al cielo hacia Dios Padre, que asoma entre las nubes extendiendo sus brazos. La escena aludiría a las palabras “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”, una de las siete últimas frases que Jesús pronunció durante su crucifixión, antes de morir, tal como se recogen en los Evangelios canónicos.
La compasión deriva de grabados de Rubens, salvo el guerrero, que procede de modelos típicamente manieristas. En el reverso una dedicatoria: “Diolas Fran Martinz i su muger Ysabel de Abastas”. La misma se repite en el marco entre cruces de Santiago.
Procede de la sacristía de la iglesia de Santiago. Forma pareja con otra con el tema de la adoración de los pastores.