Los profesores del Colegio riosecano de Campos Góticos despidieron el curso, como es habitual, con una comida que sirvió para poner punto y final a todo un intenso año y para despedir a aquellos docentes que el próximo curso escolar no tendrán a la Ciudad de los Almirantes como destino. Los recuerdos, las risas y el buen ambiente marcaron una jornada muy emotiva.