Creo que es hasta denunciable el que una plaga de avispas campe a sus anchas en una piscina municipal y que diariamente piquen a los usuarios que inocentemente pasen por allí. Eso es lo que pasa en la de Rioseco en la que nos han picado a casi todos los miembros de mi familia y de lo cual puede dar fe el socorrista que nos atendió y no sólo a nosotros (la foto es de mi hijo tras el mal rato que pasó ese día con la picadura en el párpado).
Pero lo peor, con serlo, fue la respuesta que se nos dio desde el Ayuntamiento donde un funcionario, además de no mostrar ningún interés en nuestra queja, nos vino a decir que por no estar empadronados en el pueblo (aunque si tengo una casa en la que resido por temporadas) no tengo los mismos derechos que los residentes y además nos amenazó con la noticia de que gente como nosotros iban a pagar el doble por utilizar la piscina el próximo año. Lamentable.
Desde el Ayuntamiento se informa a este periódico que hace unos días se ha fumigado la piscina y sus aledaños para combatir las avispas. Algo que según las mismas fuentes ha dado su resultado. No obstante, aseguran que es imposible eliminar este y otro tipo de insectos.