Parecían pequeños universitarios recién licenciados, muy sonrientes con sus birretes y diplomas, que acreditan que son la quinta promoción de graduados de la Escuela Infantil Virgen de Castilviejo. La directora del centro infantil riosecana, Noelia Estébanez, abrió el acto de graduación con unas palabras dedicadas a los padres de los pequeños.
Uno a uno, los escolares fueron subiendo al escenario para recibir su birrete y la carpeta con los trabajos del curso, de manos de sus tutoras Belén y Pili. Todos ellos deleitaron a los familiares con un divertido baile. Lucía, la madre de uno de los peques, leyó un entrañable escrito dedicadas a las profesoras y todos los componentes de la Escuela (Noelia, Nuria, Candelas, María, Mari Carmen, Pili, Belén y ana) recibieron un regalo personalizado que fue entregado por los niños.
El acto, al que acudió el alcalde Artemio Domínguez acompañado de algunos de los concejales, finalizó con un refresco que se organiza con la colaboración de todas las familias. Desde estas líneas, la familia de la Escuela Infantil Virgen de Castilviejo quiere agradecer a todos los padres y familiares su colaboración.
Queridos profesores del centro…
Hoy día 14 de Junio de 2013, señalado como el día en que nuestros hijos se gradúan y dicen adiós al Centro Virgen de Castilviejo.
Queremos daros las gracias por vuestra dedicación y esfuerzo, por vuestra profesionalidad y entrega y, singularmente, por el cariño y afecto con el que habéis tratado a nuestros hijos, quienes sin duda, os llevarán siempre en el más profundo cariño de sus jóvenes corazones.
No es fácil dejar a un niño en manos de otra persona, pero, desde el primer momento, nos hemos sentido muy tranquilos pues vuestra vocación y docencia se convirtió en una extensión del cariño familiar. Para nuestros hijos sois también sus madres, unas madres maravillosas.
Es evidente que el trabajo de maestro es poco valorado en nuestra sociedad, y en estas etapas primeras, tal vez aún menos, aunque nosotros los padres, nos podemos hacer una idea de vuestro esfuerzo, claro; pero en vuestro caso hay que multiplicarlo por el número de niños de cada aula. Es un trabajo muy bonito el que desarrolláis, pero muy difícil, y lo habéis hecho muy bien. Eso se nota en la alegría de nuestros niños al entrar en el aula y en la madurez y en la socialización que han adquirido en estos años tan vitales. Gracias.
Vuestro cariño tan humano, tan personal, tan sincero y tan profesional os hacen merecedoras del mayor de los elogios que nosotros los padres, os podamos reconocer abiertamente; por eso, hemos decidido escribiros estas simples líneas, entre las que subyace, sin duda, nuestro más sincero agradecimiento por todo. Nuestros hijos no tienen aún el conocimiento suficiente para escribiros, pero tienen la sonrisa más bella del mundo para daros las gracias y, el llanto de sus primeros días, se ha convertido en una perenne sonrisa. Ese es su agradecimiento.
Gracias al Centro Virgen de Castilviejo, a su Directora Noelia; a sus educadoras Belén, Pili, Mari Carmen, Ana, María y gracias a Nuria y a Candelas. También dar las Gracias al Ayuntamiento de Medina de Rioseco y la Empresa CLECE. Sin ellos no tendríamos Guardería.
Os deseamos a todas todo lo mejor.
Lucía Toribio (en nombre de todas las familias)