La lluvia obliga a suspender por segundo año el Jueves Santo

Los tres primeros pasos salieron a la calle y tuvieron que resguardarse en la iglesia de Santa María. A las 21.15 horas se daba por finalizada y se cantaba la Salve

José Ángel Gallego Vázquez. Fotos: Fernando Fradejas

Presidentes de las cofradías minutos antes de suspender la procesión, junto al representante de la Junta de Semana Santa.

Si ni los más viejos del lugar recordaban que se hubiera suspendido la procesión del Jueves Santo, nadie podía imaginarse que por dos años consecutivos la lluvia diera al traste con la procesión del Mandato. 2011 y 2012 quedarán ya como dos años aciagos para la Semana Santa de Medina de Rioseco.

Las previsiones meteorológicas no pintaban nada bien desde hace varios días y los malos presagios, desgraciadamente, se cumplieron a rajatabla. El Jueves Santo amaneció lloviendo y finalizó de la misma manera. A pesar de ello, la lluvia dio una tregua a medio día y tras los refrescos, las hermandades realizaron el desfile de gremios sin ninguna complicación. Después de los Oficios, minutos antes de las ocho de la tarde, el agua hacía aparición de forma muy débil;  a pesar de ello, los tres primeros conjuntos escultóricos –Oración en el Huerto, Flagelación y Jesús atado a la Columna- salían a la calle.

La Flagelación, tapado con plásticos, a su regreso a Santiago.

El cuarto paso, el Ecce Homo, cuando se disponía hacer lo propio, ya en la misma puerta del templo, decidió esperar justo cuando la lluvia arreciaba y el atrio se poblaba de paraguas. La cosa se ponía tan negra como los nubarrones que encapotaban el cielo. Los tres pasos en la calle buscaron el abrigo de la iglesia de Santa María y los presidentes de las cofradías comenzaron una serie de reuniones, bajo la Vara Mayor de la Junta de Cofradías, buscando previsiones en el Centro de Meteorología.

Se decidió esperar y al filo de las nueve y cuarto de la noche, los presidentes de las cofradías “unánimemente” decidían la suspensión de la procesión “porque es inviable”, tal y como anunció por la megafonía el secretario de la Junta de Cofradías que hoy ostentaba la presidencia de la procesión, Antonio Concellón.

Las lágrimas afloraron en muchos cofrades, sobre todo en los más jóvenes, que asistían atónitos  a la segunda suspensión consecutiva en dos años. La Virgen Dolorosa fue situada en centro de la iglesia, bajo el churrigueresco retablo del templo, donde se cantó la Salve, por cierto, con una entonación algo diferente a la tradicional.

Minutos después, ya con una lluvia más ligera, los tres pasos que permanecían en Santa María arribaron a su iglesia de origen, tapando sus tallas con plásticos. Todas las cofradías rezaron ante su imagen titular y entre un mar de túnicas, algunas lágrimas, caras desconsoladas e incredulidad se comenzaba el camino de regreso a casa y a las cenas de hermandad.

El paso del Ecce Homo a la espera de una decisión. El corro, al fondo, poblado de paraguas

Vea las mejores imágenes del Jueves Santo

El derecho a la información desde el respeto
“Para otro año será”, “parece mentira no ha llovido en todo el año y llueve ahora”, “se podía haber esperado un poco más”, “qué mala suerte”. Estas eran las principales conversaciones que se podían escuchar a la salida del templo, cuando la procesión ya había sido suspendida. A tenor de lo visto horas más tarde, se acertó en una decisión que siempre resulta complicada y que ayer tomaron los presidentes de las nueve hermandades con la Junta de Cofradías. Por cierto, en la reunión celebrada junto a la sacristía de la iglesia, un redactor gráfico de este diario fue expulsado de malas formas por el representante de la Junta Local de Semana Santa. En ningún momento lavozderioseco.com molestó a ninguno de los presentes en una reunión, realizada, ante la libre mirada de quien quisiera acercarse, puesto que no estaban en una sala aislada, sino en la propia iglesia. Máxime, además, cuando había otros fotógrafos y sólo fue reprendido el representante de La Voz. Desde este diario lamentamos lo sucedido por el fondo y, sobre todo, por las formas, pues nosotros solo cumplíamos con nuestra labor de informar dentro del derecho de libertad de expresión que nos ampara y desde el máximo respeto a nuestra Semana Santa y a nuestros lectores. Una pena, como la lluvia.

Fotografías por José Ignacio Santamaría

share on: