La lluvia no impide la llegada de los Reyes Magos a Rioseco

Melchor, Gaspar y Baltasar arrivaron a la localidad en el barco Antonio de Ulloa; más tarde viajaron en sus carrozas hasta el Ayuntamiento y recibieron a los niños

Fotos: Fernando Fradejas, Teresa Castilviejo, Bea Rodríguez y Pedro Villa

Sus Majestades los Reyes de Oriente llegaron a Medina de Rioseco cargados de regalos y juguetes con una larga noche por delante para repartirlos por todas las casas de la localidad. Y como viene siendo habitual en los últimos años lo hicieron en barco, en la embarcación turística Antonio de Ulloa que los transportó por el Canal de Castilla hasta llegar a la dársena riosecana. Allí saludaron a todos los niños presentes y al alcalde de Medina de Rioseco, Artemio Domínguez, que ante las cámaras de lavozderioseco.com pedía “ilusión, salud y felicidad para todos los riosecanos y un gran éxito en las Edades del Hombre”.

Melchor, Gaspar y Baltasar saludan desde el barco a su llegada a Rioseco.

A pesar de la lluvia que no cesó durante toda la tarde, cientos de niños se congregaban a las siete en punto en la concha del Canal. Unos fuegos artificiales fueron el mejor prólogo para recibir a sus Majestades, que viajaban en la proa del barco. Los aplausos y los vítores se hicieron más fuertes cuando, entre la negrura de la noche, apareció el barco con Melchor, Gaspar y Baltasar.

Tras desembarcar, subieron  a sus carrozas repletas de caramelos y recorrieron las principales calles de Medina de Rioseco, abarrotadas de gentes que no quisieron perderse la llegada de sus Majestades, que en los últimos días han completado un duro viaje desde el lejano Oriente. La cabalgata constaba de cuatro carrozas principales: la de los Magos, la de la Virgen, San José y el Niño, así como caballos y una bonita calesa que precedían al cortejo.

El rey Gaspar con un niño.

Gaspar, a su llegada al Ayuntamiento, respondía a las preguntas de lavozderioseco.com. “Ha sido un viaje muy largo lleno de imprevistos pero al fin hemos llegado cargados de juguetes. Los niños riosecanos se han portado muy bien, salvo excepciones, así que esta noche nosotros seremos buenos con ellos”. Los Magos salieron al balcón del Consistorio a saludar a los presentes, que aguantaban estoicamente la lluvia. Baltasar, en nombre de los tres Reyes, se dirigió a los presentes. “Desde Oriente os traemos los mejores deseos de salud, paz y amor para todos”. El rey negro preguntó “¿Habéis sido buenos este año? ¿Os habéis portado bien?”. La Plaza Mayor entonces rugió al unísono “síiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii”.

Minutos más tarde, los Magos fueron recibiendo, uno por uno, a todos los niños congregados en el Ayuntamiento. Antes también, y como es costumbre, Melchor, Gaspar y Baltasar habían visitado la residencia de ancianos y el convento de Santa Clara. Después de tantas emociones, los pequeños se fueron a dormir con unas enormes ganas de que amaneciera para poder abrir todos sus juguetes.

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