El pleno de la corporación en su sesión ordinaria del jueves dio el visto bueno a la renuncia por parte de la Junta Local de Semana Santa del inmueble municipal situado en la calle Empedrada (junto a la iglesia de Santa María) que se iba a convertir en un centro de actividades de la Junta de Cofradías riosecana, que complementara su sede social de la calle Santa María.
El desarrollo de los acontecimientos es el siguiente: El Ayuntamiento de Medina de Rioseco ofrece a la Junta Local de Semana Santa dos posibles locales para que pudieran ser utilizados por esta institución, que agrupa a todas las cofradías de la Pasión riosecana; por una parte, se ofrece el edificio de nueva construcción situado en la calle Empedrada y, por otra, la planta segunda (ático) del rehabilitado edificio del Casino. La Junta Permanente de la institución semanasantera opta por el primer inmueble y solicita al Proder una ayuda para acondicionar interiormente el edificio (un proyecto que asciende a algo más de 36.000 euros), de los cuales la subvención que, también se aprueba, corre con el 75 por ciento de los gastos. El pleno de la corporación da el visto bueno a la cesión y parece que el nuevo edificio podrá formar parte de la infraestructura de la Junta. Tal y como reconoce Andrés San José, presidente de la agrupación de Cofradías, se utilizaría “para algunas reuniones, para uso de las propias hermandades y para disponer de un archivo en condiciones”.
Pero la historia sufre un giro de 180 grados, cuando tras la solicitud aprobada por parte del Consistorio y la subvención de Fondos Europeos concedida, la Junta permanente lo somete a votación ante la Asamblea General (conformada por los representantes de cada cofradía) y estos y según el relato del propio Andrés San José rechazan esta opción y piden ver el edificio del casino. “La Asamblea, por mayoría, vota en contra de gastar ese dinero en el edificio en la calle Empedrada y quedarse con el Casino”, dice San José, quien se ha visto obligado a rechazar “con todo dolor de mi corazón”, el primer proyecto “para el que ya teníamos aprobada una subvención y hemos tenido que rechazarla”.
El actual presidente de la Junta de Semana Santa explica que ahora habrá que ver qué pasa con la planta superior del Casino, “pues en estos momentos está ocupada por la Banda Municipal de Música”. No obstante, cualquiera de las dos opciones implica que la sede social siga instalada en el mismo lugar, en los bajos del edificio de la Calle Santa María. “Desde la comisión permanente habíamos barajado mejor el edificio de la calle Empedrada, porque aunque no es demasiado grande tiene dos plantas y se podría haber aprovechado mejor, para complementar la sede que ahora tenemos”, concluye San José. El local situado en la parte superior del edificio del Casino de Recreo cuenta con un despacho, una sala de reuniones y una galería con vistas al corro, todos los espacios ya amueblados. Además, cabe la posibilidad de utilizar el salón de la primera planta para las recepciones más importantes.
Desde el pleno de la corporación, especialmente la oposición, no entendió la decisión de esta renuncia y pidió explicaciones al alcalde. Artemio Domínguez contestó que “en una junta extraordinaria las cofradías han votado en contra de la decisión inicial. Habrán reflexionado mejor”, aseguró. Desde IU, Ignacio San José argumentó que “no es una jugada bonita para los que estamos aquí sentados” y testificó que “la Junta pasa un mal momento y que muchas personas han hecho la vida imposible al propio presidente”.
Isidoro García Pando, portavoz del PSOE calificó el episodio de “rocamboleso” y tras hacer un pormenorizado resumen de los hechos aseguró que se trata de una falta de entendimiento “entre la Junta de Gobierno y la Junta de Semana Santa”. “Esto ha supuesto unos gastos para las arcas municipales y el dinero invertido en este inmueble gracias al Plan E del Gobierno de España podía haber sido utilizado en otro proyecto que hubiera sido más necesario”, dijo Pando, para acabar acusando al alcalde de haber hecho un “ofrecimiento temerario” de ambos locales antes de comunicárselo al pleno. Artemio Domínguez concluyó recordando que “quien renuncia al local es la Junta Local de Semana Santa, no nosotros”.
De momento se desconoce qué uso podrá albergar el nuevo edificio de la calle Empedrada, aunque según ha podido saber este periódico otras asociaciones de Medina de Rioseco podrían estar interesadas en su cesión. No obstante, la necesidad de finalizar las obras interiores y su acondicionamiento es lo que echa para atrás a las posibles novias de este inmueble municipal, que a punto estuvo de convertirse en un edificio de la Junta de Semana Santa.
Un pleno ‘calentito’ en su última parte
El pleno ordinario correspondiente al mes de septiembre tuvo en su desarrollo otros puntos del día que se aprobaron sin demasiado debate. Fue el último punto, el relacionado con ruegos y preguntas, donde la sesión se alargó y en algunos casos vivió momentos más tensos. Desde Izquierda Unida se pidió el arreglo del ascensor del Centro de Interpretación de la Ciudad de los Almirantes, además de que el equipo de Gobierno de oportunidades a todas los alumnos de los cursos de turismo “y no sólo a los mismos”. El concejal socialista Baltasar de la Cruz llevó una amplia batería de ruegos y preguntas en el que los temas más importantes fueron la necesidad de regular el mercadillo de los miércoles, especialmente en la zona de Urgencias del Cetro de Salud “que se colapsa cada miércoles”, la adjudicación del edificio de El Torno en los próximos días y la petición al equipo de Gobierno de un mayor control sobre las terrazas de los bares “porque muchos ponen las mesas y sillas que quieren y dónde quieren”. En algunos momentos de esta última parte de la sesión, Artemio Domínguez y el edil socialista se enzarzaron en una discusión dialéctica acalorada, especialmente cuando Baltasar de la Cruz acusó al PP de “colocar a familiares de concejales y exconcejales”. El alcalde no permitió estas imputaciones y contestó al concejal, en otro orden de cosas, que se han regulado el tráfico en las calles aledañas al Centro de Salud para que no se repitan casos extremos como el ocurrido en el mes de mayo, donde la ambulancia con un enfermo que sufría un infarto apenas pudo entrar en Urgencias. Domínguez recordó que el proceso de adjudicación de El Torno será “un concurso abierto donde podrá presentarse cualquier ciudadano y que se valorará de forma totalmente objetiva”.