Las fuertes rachas de viento con lluvia del pasado martes que provocaron la caída de una gárgola de piedra de la iglesia de Santa Cruz, hicieron también que entrara agua al interior de Museo de Semana Santa (iglesia de Santa Cruz), lo que provocó que hubiera que poner algunos plásticos sobre espacio que alberga la taquilla y la tienda del céntrico museo. En este sentido, Antonio Santamaría, presidente de la Asociación protemplos que gestiona el museo, indicó la necesidad de que se lleve a cabo “una revisión de todo el tejado de este templo para evitar de forma definitiva unas goteras que podrían afectar a las imágenes de los pasos procesionales de Semana Santa que se exponen en el museo” Una necesidad que el presidente de la Asociación para la Conservación y Restauración de los Templos ha hecho llegar ya a la dirección general de Patrimonio, ya que “aunque este templo no está declarado Bien de Interés Cultural, no hay que olvidar que el Museo de Semana Santa es una obra financiada por la Junta de Castilla y León, que alberga uno de los mejores conjuntos procesionales”.