Fue una velada memorable. Las expectativas se cumplieron con creces y la segunda de las Tardes de Arte 2015 resultó el pasado domingo un gran éxito. Los secretos del correcto uso del español llegaron de la experta mano del filólogo Alberto Gómez Font al salón principal del casino ante un buen número de personas que disfrutaron de la actividad.
El director del Museo de San Francisco, Miguel García Marbán, fue el encargado de conducir una entretenida entrevista que se abrió recordando, en las palabras del periodista Ramón Alemán, que Alberto Gómez Font, además de ser “un barman apasionado”, “ha hecho mucho por el cuidado de nuestra lengua, primero en el Departamento de Español Urgente (DEU), de la Agencia Efe; después en la Fundación del Español Urgente (Fundéu), de la que fue coordinador general; y más recientemente como director de la sede que el Instituto Cervantes tiene en Rabat y como miembro correspondiente de la Academia Norteamericana de la Lengua Española”.
Desde hace bastantes años Alberto Gómez Font vista varias veces Medina de Rioseco después de que su padre, Pedro Gómez de Santamaría, adquiriera una casa para estar cerca de su localidad natal, Cueca de Campos.
Su paso por el Departamento de Español Urgente, de la agencia Efe, y por la Fundación del Español Urgente; el español hablado y escrito; la ortografía y la ortotipografía; “los verbos asesinos” (en referencia al repetido uso realizar, iniciar y finalizar) o el léxico fueron paradas obligadas de una conversación en la que Gómez Font enfatizó en su constante empeño de dejar respirar a la lengua.
También hubo tiempo para hablar de su faceta de escritor y de sus libros hasta ahora publicados, Cócteles tangerinos y Sabores colombianos. El primero “es un ejercicio de mezcla de ficción y realidad para recrear un Tánger que me encantaría haber conocido y al mismo tiempo es un cordial (en sentido etimológico) homenaje al Tánger y a los tangerinos que sí he tenido la suerte de conocer y disfrutar”, según García Marbán leyó del prólogo de la publicación. Gómez Font confesó que el protagonista de los relatos, Isaac Toledano, es su alter ego.
Sabores colombianos es una novela autobiográfica en la que el autor cuenta su infancia y juventud entre Pereira (Colombia) y España. En una preciosa carta de su padre, que prologa la novela, se puede leer “ver las cosas con otros ojos y en otros tiempos y estar presente en los recuerdos me hace pensar que de alguna manera fui participe del descubrimiento e invención del mundo de que poco a poco irías tomando posesión y sería el marco en que había de realizar tu vida”. Gómez Font recordó el famoso pasaje de la magdalena de En busca del tiempo perdido, de Marcel Proust, para explicar el origen de su novela, en este caso con el sabor del zumo de melocotón.
Antes de que el alcalde riosecano, Artemio Domínguez, le entregara el conocido como “goya riosecano”, Gómez Font aconsejó para el correcto uso del español el leer la prensa escrita, a la vez que animó a todos a disfrutar con las diversas variedades del idioma.