La Escuela de Tapetantes que cada año convocan la Junta Local de Semana Santa y La Voz de Rioseco, a través de su programa El Pardal, congregó este Viernes de Dolores a más de medio centenar de niños que aprendieron los primeros pasos para tocar este instrumento netamente riosecano.
Algunos cofrades y padres fueron los encargados de enseñar este peculiar toque que se ejecuta con unas baquetas de madera sobre un tambor tapetado. Los pequeños disfrutaron de lo lindo con esta actividad que tuvo, como continuación, el traslado del paso de La Borriquilla desde el Museo de Santa Cruz hasta la iglesia de Santiago.
Tras la Escuela y el cortejo de niños escoltando la imagen de Cristo a lomos de la borriquilla se celebró una chocolatada para todos los participantes en el Centro Parroquial de Rioseco. La lluvia dio una tregua y permitió que las actividades se celebrasen sin problema.