Se presentaba el CD Rioseco, tras el parón navideño, en el campo de uno de los gallos de la categoría, el C.D. Onzonilla de León. Comenzaron los albinegros dejando la iniciativa del juego a los leoneses, que desde el pitido inicial, sin ningún tipo de complejo, dejaron claro su estilo de juego basado en juego directo buscando a su gran baza ofensiva su enorme delantero Toño. Una y otra vez se aprovechan de su gran estatura para que éste prolongue hacia sus extremos y puntas que entran en velocidad a la espalda de la defensa.
Debido a su enorme altura, los zagueros riosecanos no eran capaces de contrarrestar los primeros balones y la segunda jugada empezó a causar mucho peligro, así como los numerosos saques de banda que se producen en los primeros minutos. A pesar de eso el equipo consigue salvar esas ocasiones y empieza a saberlo contrarrestar sacando más la defensa y estando más atento a esas prolongaciones cogiendo unos metros.
Tras este primer cuarto de hora, el equipo empezó a estar mejor colocado. El primer aviso de los riosecanos fue a un tiro lejano de Valdi, que puso en muchos apuros al portero leonés a la salida de un córner. Inmediatamente después llegó la jugada desafortunada que acabó con el primer gol del Onzonilla. La acción ya comentada, golpeo directo al delantero Toño que prolonga al extremo Luisfe que gana la posición al lateral Valdi y tras el forcejeo y ante la salida del guardameta riosecano, Fonso, golpea forzado con tan mala suerte que el esférico golpea en Valdi y se cuela en la portería, subiendo el primer tanto al marcador.
A raíz del gol, que llega en el ecuador de la primera mitad, se hace más patente que el Rioseco coge las riendas del juego, presiona más arriba y empieza a crear más peligro. Es cuando llegan sus mejores ocasiones. Un disparo de Paco tras irse de un rival que sale rozando el palo y la más clara una jugada entre los dos arietes riosecanos, Paco y Alberto en la que éste último ve desmarcado al joven Buddy que solo ante el portero no acierta a enviar el balón entre los tres palos, cuando la expedición blanquinegra ya cantaba el gol del empate.
Con alguna ocasión más se llegaba al descanso, y la sensación era que el Rioseco podía remontar el encuentro en el segundo tiempo pues se imponía en el juego y en las ocasiones de gol.
Comienza la segunda mitad de la misma forma que había terminado los primeros 45 minutos. El Rioseco sale muy enchufado, presionando muy arriba a su rival y robando el balón en campo contrario, creando peligro en llegadas muy rápidas de Paco, Alberto y Santos principalmente.
El premio al buen trabajo y el esfuerzo realizado llegó en forma de gol y empate. Gato, recién incorporado en el terreno de juego, hace pared con Paco que tras irse de un rival cede el balón a Alberto que se va solo contra la portería y define con mucha clase poniendo el esférico lejos del portero.
Justo empate en el min. 55 que daba más fuerza y entusiasmo al juego de los blanquinegros que ven la posibilidad real de dar la vuelta al marcador. En esos momentos el Onzonilla veía impotente como el único equipo en el campo era el Rioseco. Llegan incluso varias disputas entre los propios jugadores leoneses y comienzan a endurecer un poco el juego.
Pasan los minutos y el Rioseco sigue llevando mucho peligro, hasta tal punto que todos los aficionados que se desplazaron a apoyar al equipo cantaron gol en algunas de las jugadas más claras. Tales como una falta lateral lanzada por Xurre que pasó entre las piernas de varios jugadores lamiendo el palo de la meta leonesa, o un tiro lejano realizado por Valdi al borde del área en el cual el portero leonés solo pudo mirar como el balón rozaba el poste derecho saliendo a saque de puerta.
El entrenador local veía a su equipo contra las cuerdas y decide hacer dos cambios muy importantes. Introdujo a dos de sus mejores hombres a los que había decidido dar descanso y este hecho dio un poco más de aire a su equipo. Cuando mejor estaba jugando el Rioseco y curiosamente en el enésimo ataque, el Onzonilla consiguió robar en las inmediaciones de su área y montar un perfecto contragolpe que derivó en el gol que, a la postre, le serviría para adjudicarse los tres puntos. Aunque durante toda la segunda mitad estuvo inadvertido fue de nuevo su delantero Toño fundamental al cabecear de forma certera un perfecto centro de Luisfe desde la línea de fondo.
Quedaban 10 minutos y el gol llegó como un mazazo a los jugadores albinegros, aunque de nuevo demostraron la garra y la casta de un equipo que pese a las adversidades nunca baja los brazos. Los últimos minutos el Rioseco se volcó hacia la portería leonesa creando un buen puñado de ocasiones más, muchas de ellas de auténtico peligro pero ahí también salió a relucir el buen hacer defensivo del Onzonilla que demostró estar muy a gusto defendiendo la renta.
Fue sin duda uno de los mejores encuentros del Rioseco que sin embargo se quedó sin el premio de los puntos. Resultado pues injusto y un muy mal sabor de boca entre los aficionados y los propios técnicos y jugadores que veían como el trabajo realizado no había servido para seguir con la buena racha de resultados iniciados en las últimas jornadas del pasado año. Esta semana el equipo descansa, aunque no para de trabajar para lograr ir sumando los puntos necesarios para situarse en una zona más tranquila de la clasificación.
C.D. Rioseco: Fonso, Valdi, Piti, Gómez, Tazi, Juanpe, Xurre, Santos, Buddy, Alberto y Paco. Completaron la convocatoria Zorro, Candi, Chapa, Tomás y Gato.