El casi centenar de cazadores riosecanos vela ya armas en espera de la apertura de la media veda que tendrá lugar este jueves, 15 de agosto, festividad de la Virgen. Un inicio de la temporada de la codorniz que se espera “sensiblemente mejor que el pasado año”, aunque dependiendo de las zonas, según explica el presidente de la Federación regional de caza, Santiago Iturmendi.
La estrella de la media veda, la codorniz, ya se ha dejado ver en muchos de los cotos aunque Iturmendi prevé que será en las provincias de Palencia, Burgos y Soria, zonas aún sin cosechar, donde las capturas sean más numerosas.
No obstante, la media veda se prevé buena y el presidente de los cazadores castellano y leones dice que es una buena noticia “ya que el colectivo cazador estaba necesitado de un año ilusionante como este”, asegura.
Los días hábiles para la media veda en la provincia de Valladolid son un total de veinte, distribuidos en agosto, los días 15, 17,18, 20, 22, 24, 27, 29 y 31 y en el mes de septiembre el 1, 3, 5, 6, 7, 8, 10, 12, 14 y 15. No obstante, cada coto de caza podrá establecer dentro de este abanico las fechas que consideren oportunos e incluso los horarios de actividad.
De hecho, el presidente de la Federación regional de caza cree que los responsables de cada coto deberían retrasar el inicio o adelantar el cierre según las necesidades cingéticas de cada zona y regular también el horario; “de 12 a 18 horas no se debería cazar”, asegura.
Aunque el plato fuerte de la media veda es la codorniz, también se abre la temporada de la tórtola, paloma, córvidos y zorros. En el caso de la codorniz este año se ha bajado de 35 a 30 el cupo de piezas por cazador.
El futuro del mundo de la caza es, por el momento, complicado. “No existe relevo generacional”, rubrica Santiago Iturmendi. “Todo porque esta sociedad valida dos argumentos muy demagogos: la sangre y las armas. Cuando en realidad el papel del cazador es muy importante para mantener un necesario equilibrio de los ecosistemas”, dice el presidente de la federación quien apuntilla: “tengo un amigo que dice que cuando no haya cazadores se tendrá que crear un Cuerpo Nacional de Cazadores para asegurar ese equilibrio en la naturaleza”. Iturmendi va más allá y cree que los jóvenes, debido a las nuevas tecnologías, “tienen un mayor apego al asfalto que a la naturaleza”. “Es un error”, dice este cazador, quien cree que la juventud debería “salir mucho más al campo”, porque la naturaleza “es una gran profesora” Por último, Santigo Iturmendi añade que por si fuera poco la crisis ha machacado el sector. “La subida en más de un 60% de tasas ha provocado que mucha gente que lo esté pasando mal haya colgado la escopeta” y sentencia: “en la última década Castilla y León ha pasado de contar con 170.000 licencias a menos de 120.000”.