CDR Tierra de Campos: 25 años de apuesta por la comarca

“Han sido 25 años de supervivencia y resistencia”. Así resume las bodas de plata del Colectivo para el Desarrollo Rural de Tierra de Campos su gerente, Javier Paniagua. 25 años donde se ha luchado “por mejorar la calidad de vida que viven en la comarca y frenar la despoblación, intentando que la gente no se vaya de esta tierra”.

El 23 de junio de 1991, 17 asociaciones y entidades ponían en marcha el proyecto. Hoy son 63 socios, entidades públicas y privadas como asociaciones, colectivos, fundaciones, entidades locales, empresas e incluso personas físicas, siempre con la vista puesta en la comarca terracampina, en las provincias de Valladolid, Palencia, Zamora y León.

Javier Paniagua hace balance “muy positivo” de estos 25 años. “Intentamos dar a conocer a la sociedad riosecana y a los municipios de la comarca los proyectos e iniciativas”. El gerente del colectivo recuerda que no ha sido fácil llegar a soplar las 25 velas. “Las entidades del tercer sector estamos sufriendo permanentemente recortes, tanto a nivel de proyectos y presupuestos”, aclara.

En estos 25 años, a través de numerosos y variados proyectos, el objetivo ha sido “traer recursos a la comarca”, con fondos europeos, pero también del Gobierno de la nación. “Apoyando económicamente a los emprendedores que querían montar su negocio en la zona, afianzando empleo y haciendo que la gente no se vaya del medio rural, que es una de nuestras metas”, explica Paniagua, que desde enero asumió el cargo de director-gerente de esta entidad social sin ánimo de lucro y catalogada como de carácter social por la Junta de Castilla y León, que también recibió el premio derechos de la Infancia de Castilla y León 2003.

Sus destinatarios son muy variados: “desde programas dirigidos a la infancia, pasando  por los jóvenes y a los mayores, pero también a las mujeres”. Javier Paniagua explica que con todos estos colectivos se trabajó desde el minuto uno con “la alfabetización digital”.

“Fuimos los primeros en la comarca, en el año 1991, en comprar ordenadores portátiles e ir por los pueblos de la comarca a enseñar qué era eso de la informática”. Recuerda como un “hito importante” el Centro de Información Europeo, que gestionaron durante algunos años.

5.000 destinatarios anuales

Rioseco es el epicentro del Colectivo y también del programa Medida 19 Leader que agrupa a 22 municipios del entorno. En sus 25 años de historia, el colectivo ha gestionado infinidad de proyectos y programas, que han contado con una media anual de 5.000 destinatarios. Javier Paniagua destaca algunos.

“Uno de los proyectos más bonitos ha sido sin duda el periódico comarcal de La Mar de Campos, nacido en 2007, que aglutina varios aspectos como el de la comunicación en el medio rural y la participación ciudadana, con una red de colaboradores de cerca de 50 personas. Creo que es un proyecto que eleva la autoestima de la población y que cueste lo que cueste seguiremos manteniendo”.

A nivel de empleo, la Escuela Rural de Emprendedores (2012) fue un auténtico acierto con decenas de empleos creados y con un programa de formación a la carta para los emprendedores con tres patas: “orientación, información y formación”. Javier Paniagua reconoce que a nivel social, uno de los proyectos que más le ha cautivado ha sido el apoyo piscosocial a personas que lo han necesitado. “Desde alguien que pierde el trabajo, hasta personas que viven solas o que sufren cuadros de ansiedad y depresión”. “Un programa, puesto en marcha con La Caixa, y que ha acompañado a un montón de personas de todas las edades”, apunta.

El futuro: Smart Rural y apuesta por el turismo

El Colectivo para el Desarrollo Rural de Tierra de Campos está en plena forma. Afronta el futuro con optimismo y con ganas de “seguir al menos otros 25 años”. “Si algo hemos aprendido ha sido a levantarnos tras una caída”, dice su gerente, quien informa que en la actualidad se gestiona una nueva Medida Leader hasta el año 2023.

Javier Paniagua se marca como objetivo “mantener todo lo que tenemos”, aunque le gustaría gestionar algún nuevo proyecto turístico. “Hasta el momento no hemos tocado este sector, porque el nivel turístico de la zona es importante, especialmente gracias a la Diputación”. Ideas hay muchas. Una de ellas es extrapolar el concepto de ciudad inteligente al mundo del pueblo. “Crear un smart rural, con todo lo que ello conlleva”.

Por supuesto, quieren seguir apostando por la lucha contra la despoblación. “Estamos inmersos en el proyecto Abraza la Tierra. Tenemos muchas demandas de urbanitas que quieren venirse a vivir al medio rural, pero nosotros pretendemos que lo hagan con una iniciativa empresarial debajo del brazo”, concluye Paniagua, antes de poner encima de la mesa otro problema: el parque urbanístico. “Muchas casas que se caen porque sus propietarios, ni venden, ni alquilan, ni arreglan. Hay que solucionarlo”, sentencia. Por ganas y proyectos no va a quedar.