Las águedas riosecanas volvieron a tomar las calles de la Ciudad de los Almirantes en el día de su patrona para reivindicar el papel de la mujer y celebrar el 25 aniversario de la cofradía, con una jornada de diversión y alegría en compañía de algunas de las componentes de esta agrupación femenina de la Ciudad de los Almirantes, que hermana a más de medio centenar de mujeres.
De esta manera, ataviadas con sus trajes tradicionales, la alcaldesa saliente, Teresa Alonso, la Vara y la Junta de la cofradía riosecana recogieron a la nueva alcaldesa, Antonia Blanco, en su domicilio para dirigirse así al Ayuntamiento de la localidad, donde comenzaron las celebraciones. Con una gran explosión de ritmo y color, las mujeres riosecanas animaron el frío ambiente con sus bailes en el atrio del Consistorio, hasta que fueron recibidas por la corporación municipal.
El alcalde riosecano, Artemio Domínguez, hizo entrega del bastón de mando a Antonia Blanco y destacó el “gran valor” de los trajes artesanales que visten, afirmando, ante un caluroso aplauso, que “no hay nadie más guapa que las mujeres riosecanas vestidas de águedas”. Asimismo, el alcalde recordó a las mujeres que tanto hicieron por el mantenimiento de esta tradición en la ciudad: “No hay que olvidarse de todas las águedas que ya no están y que tanto trabajaron por esta cofradía; que seguro desde donde estén, también estarán disfrutando de este día”, dijo.
El momento más emotivo fue la entrega a la nueva alcaldesa de una placa, por parte de la corporación municipal, y un ramo de flores, de parte de su hija, Tamara López. Una bonita poesía de Alicia Vián, que reivindicaba el papel de la mujer, dio paso entre vítores y aplausos al himno nacional. A continuación, el salón de actos del Ayuntamiento acogió la proyección de un vídeo conmemorativo con fotografías que hacían un emotivo repaso a los veinticinco años de la Asociación de Santa Águeda de Catania de Medina de Rioseco.
Tras los actos celebrados en el Ayuntamiento, las mujeres riosecanas acudieron a misa en la iglesia de San Pedro. Tras esta, tuvo lugar la tradicional procesión de la imagen titular de Santa Águeda por las principales calles del municipio, portada a hombros por las componentes de la cofradía y amenizada con los sones más tradicionales de dulzainas y castañuelas. Después, las águedas compartieron mesa y mantel en el restaurante Los Molinos, con motivo de la celebración de la comida de hermandad. La jornada festiva culminó con la actuación flamenca de la compañía vallisoletana, Alendoy, en el Teatro Municipal.