Hace ya unas fechas que el nuevo mapa sanitario diseñado por la consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León ha entrado en vigor. Con esta reordenación de efectivos sanitarios, el centro de salud de Medina de Rioseco ha perdido un médico en favor de la capital vallisoletana.
El grupo municipal socialista ha criticado esta decisión en el fondo, pero también en sus formas. El secretario general del PSOE riosecano y portavoz de la oposición en el Ayuntamiento, Isidoro García Pando, ha explicado que con la eliminación de un facultativo, los ocho restantes tendrá que asumir un “considerable” aumento del número de pacientes por médico, pasando de una media de 800 a 1.100.
El concejal socialista dice que los profesionales que trabajan en el centro de salud riosecano han manifestado «el aumento de la carga de trabajo, además de la dificultad para cuadrar las sustituciones y las libranzas después de las guardias». “La labor de un médico no solo es pasar consulta, sino analizar estudios e informes y una tarea administrativa importante, que ahora está reducida por el aumento de las cartillas”.
Pero, a su vez, Isidoro García Pando critica la manera en la que se ha hecho. “No se puede coger las cartillas y repartirlas. Creemos que los pacientes perjudicados por esta decisión deberían haber podido elegir el médico que hubieran preferido”. Asimismo critica la manera de llevar a cabo esta medida. “Sin avisar, un viernes a una hora determinada se produjo la supresión de la consulta”. Por último, lo que más ha molestado al grupo municipal socialista son la declaraciones realizadas por el alcalde de la localidad, Artemio Domínguez, a este periódico en las que decía que se mantendrá «vigilante para que la calidad sanitaria permanezca». García Pando criticó duramente estás declaraciones tachándolas de «ridículas, absurdas y demagógicas». «Primero porque la calidad disminuye en cuanto que existe un facultativo menos, y, en segundo lugar, porque el alcalde no tiene competencias en sanidad para vigilar nada».
Los dispensadores de números que convierten en una «pollería» el centro de salud
En declaraciones a La Voz de Rioseco, el responsable del PSOE riosecano, Isidoro García Pando califica de “chapuza” y “cutrez” los nuevos dispensadores de números ubicados en el laboratorio de extracción de sangre del centro de salud riosecano. “Parece más bien una pollería que un centro de salud”. “Son dos dispensadores para coger número o bien para sintrom o para análisis sanguíneo, colocados en la sala de espera, con lo cual todo el mundo sabe a lo qué vas. No se garantiza la privacidad del paciente y creemos que está fuera de lugar y de época. Más parece un dispensario del tercer mundo que en un centro de salud del siglo XXI”. García Pando sugiere una solución más acorde, antes de criticar también la falta de homogeneidad en los carteles en todas las dependencias del centro, “muchos de ellos pegados con esparadrapo”. “Una cutrería” que para García Pando no costaría “ni un euro” el poner solución.