La futura Autovía León-Valladolid (A-60) se inaugurará con la puesta en servicio de los primeros seis kilómetros de entrada a la capital leonesa, que están «prácticamente terminados» a falta de los últimos remates por lo que en los próximos meses, en función de los recursos disponibles, se abrirá al tráfico. Sin embargo, las obras del tramo de 13,7 kilómetros de Valladolid a Villanubla no concluirán antes de que finalice el año, según el calendario oficial que se maneja y que ha conocido la Agencia Ical.
La no disponibilidad de 8.900 millones de la prórroga de los presupuestos de 2011, unos 1.600 del Ministerio de Fomento, obligan a adoptar «reajuste» en la planificación de las infraestructuras y a priorizar las actuaciones. En ese sentido, según este calendario, los trabajos entre Villanubla y Valladolid, que comenzaron en octubre de 2007, finalizarán «nunca antes de que acabe 2012». Además del tiempo necesario para ejecutar las obras, los recursos económicos con que cuente Fomento determinarán la fecha de puesta en servicio de este tramo de autovía de 13,7 kilómetros, por el que circularán los primeros vehículos en 2013, pese a que el anterior ejecutivo baraja este primer trimestre. En total esta actuación exigirá un desembolso de unos 40 millones de euros.
Sin embargo, la construcción de los primeros seis kilómetros del tramo León-Santas Martas está prácticamente finalizado, pese a que las obras comenzaron en junio de 2008, ocho meses después que en Valladolid. No obstante, la aparición de los restos arqueológicos del yacimiento de la ciudad prerromana de Lancia, situados entre Villamoros de Mansilla y Mansilla de las Mulas, complicarán la ejecución de los 19 kilómetros restantes hasta Santas Martas.
Este tramo originó un conflicto entre el Gobierno autonómico y el Ministerio cuando la plataforma Salvemos Lancia demandó al Ministerio y al Ejecutivo autonómico que preservaran los restos arqueológicos -Bien de Interés Cultural desde 1994-, lo que derivó en la resolución de la Comisión de Patrimonio Cultural de la Junta, que obligó en el mes de abril, al promotor a adoptar medidas «correctoras» para hacer compatible la construcción de la A-60 y la conservación de las excavaciones.
Además, Patrimonio exigió que estas medidas se presentaran en un proyecto, que debía recibir el visto bueno de nuevo. Ante esta exigencia, Fomento, que pretendía tapar los restos para continuar con las obras, decidió recurrir esta resolución de la Comisión de Patrimonio al entender que no se ajustaba «a derecho» y perjudicaba los intereses del Estado, ya que obligaba a paralizar la construcción de la A-60 en el municipio leonés de Villasabariego. Por tanto, el enterramiento, que debe garantizar su conservación, así como su interpretación en un futuro, no permite que la autovía pase por encima de Lancia y conecte Santas Martas y la capital leonesa. Además, los arqueólogos del Ministerio y la Junta deben acordar la solución que se da al yacimiento, así como a los restos recuperados. En cuanto al tramo de Santas Martas a Villanubla, el proceso administrativo previo a las obras no avanza desde hace casi dos años. El Gobierno informó en enero de 2010 de la declaración de impacto ambiental favorable a la construcción de estos 89 kilómetros, lo que necesitaría de 365,4 millones de presupuesto. En abril, el Ministerio aprobó el estudio informativo, sin que desde entonces se haya encargado la redacción del proyecto constructivo y sin que se haya iniciado el procedimiento de expropiaciones.
La ministra Ana Pastor considera «prioritarias» la Valladolid-León y la Palencia-Benavente
La ministra de Fomento, Ana Pastor [en la foto junto al consejero Antonio Silván] anunció hace unos días durante su primera comparecencia en la Comisión del ramo del Congreso de los Diputados, que en julio presentará un nuevo Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, con el horizonte en el año 2024, que incluirá como proyectos «prioritarios», entre otros, la conclusión de la autovía Valladolid-León A-60, así como la Benavente-Palencia, ambas concernientes a Medina de Rioseco, ya que se cruzarán en las inmediaciones de la Ciudad de los Almirantes, formando un importante nudo de comunicaciones. El alcalde de Medina de Rioseco, Artemio Domínguez, se mostró “satisfecho” por el anuncio y aseguró que “espero que se cumplan los plazos” marcados por la ministra. “Para Medina de Rioseco y su desarrollo socioeconómico son fundamentales estas vías de comunicación, que el Ayuntamiento lleva reclamando desde hace años”, dijo. Lo cierto, es que, especialmente la autovía Valladolid-León, que une las dos capitales más importantes de la comunidad, no se concluyó ni con el Gobierno de Aznar (vallisoletano) ni con el de Zapatero (leonés), en unos años de bonanza económica que no regresarán. Un precioso tiempo perdido para Medina de Rioseco y su comarca, que ha pasado factura.