La Cofradía riosecana de San Juan de la Cruz, que celebra su onomástica este domingo, está de enhorabuena. Si en los últimos años ha sufrido un singular crecimiento hasta alcanzar la treintena de cofrades, este año 2017 será recordado como el de la recuperación de su procesión.
Desde el seno de esta hermandad, que preside Jesús San José, se venía estudiando la posibilidad de volver a posesionar la talla del Santo. Precisamente Anselmo Matas, cofrade y carpintero, prometió el pasado año –con motivo del nacimiento de su primera hija el día de la fiesta- que realizaría las andas para poder desfilar con la talla.
Tras los pertinentes permisos al arzobispado, este domingo se celebrará la procesión. Primeramente el mayordomo, Domingo Matas, ofrecerá un refresco en el establecimiento hostelero Casa Manolo. Desde allí se partirá hasta la iglesia conventual del Carmen, desde donde partirá la procesión. Se recorrerá la calle de las Armas, hasta llegar a la Calle Mayor por donde proseguirá el desfile hasta la iglesia de San Pedro Mártir, donde posteriormente se celebrará la eucaristía.
En la cofradía se muestran satisfechos e ilusionados por este nuevo paso dado que ayudará a consolidar aún más una hermandad que en los últimos años no ha hecho más que crecer.