La plantilla del Fundación Grupo Norte se trasladará, un año más, y durante tres días –del 30 de septiembre al 2 de octubre-, a las instalaciones municipales de Medina de Rioseco, en las que no solo ejercitarán el físico, sino que también aprovecharán para unirse como grupo, para fomentar el compañerismo y mejorar la comunicación de los jugadores dentro y fuera de la cancha.
Todos los componentes del equipo vallisoletano, a excepción de Luis Eduardo Jasso, que sigue en México por problemas burocráticos, participarán de esta iniciativa en la que se busca, como objetivo principal, favorecer la cohesión del grupo y establecer un clima positivo, ya que es fundamental para que los jugadores mejoren su productividad y estén más motivados.
Está comprobado que, a través de la diversión, de acciones conjuntas en las que se compartan ratos agradables, se genera un estímulo positivo y, por ello, cada año, el Fundación Grupo Norte sigue realizando estas mini concentraciones, que han encontrado en Medina de Rioseco un escenario magnífico, tanto por el pabellón, en el que realizan las sesiones de entrenamiento, como en el albergue de la Diputación de Valladolid, que colabora en la pretemporada, y el resto de instalaciones que el Ayuntamiento riosecano pone a disposición del club morado.
Será una gran oportunidad para que los nuevos fichajes -Adrián Pérez, Sergio Herrera, Karol Szulc y Kevin Roche– mejoren aun más su adaptación al equipo, y para que los más jóvenes vayan adquiriendo más responsabilidades y valentía a la hora de jugar y de demostrar su valía, como en los casos de Pablo Lavandeira y Álvaro López, los canteranos del equipo.
La preparadora física y psicóloga del Fundación Grupo Norte, Raquel Martínez, es el alma mater de esta concentración, ya que no solo se encarga de la parte física, sino también de la emotiva, de fomentar los vínculos entre los jugadores, mejorar su comunicación y crear un grupo unido y motivado, a través de actividades lúdicas que sorprenden siempre a los jugadores.
De hecho, además de tener programadas cuatro sesiones de entrenamiento en el pabellón municipal, habrá otras dos sesiones nocturnas en las que puede ocurrir de todo y que sacarán lo mejor de los jugadores, incluidas muchas risas y momentos muy agradables. También habrá tiempo para el descanso, para disfrutar de las comidas y cenas y para realizar charlas técnicas y tácticas con los jugadores, en las que el entrenador, José Antonio de Castro, tratará de seguir puliendo los esquemas de juego de cara a la nueva temporada.