El presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), Juan Ignacio Diego, ha defendido que en la limpieza de los cauces de los ríos tiene que haber “un equilibrio entre los intereses particulares, la defensa primordial de las poblaciones y la defensa del medio ambiente”. No obstante, no ha ocultado que normalmente este equilibrio es muy complejo”.
También ha argumentado que una limpieza en exceso puede perjudicar a futuras crecidas e incluso puede provocar que el río altere su cauce en caso de riada. Así se ha manifestado el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero, Juan Ignacio Diego, ante las preguntas de la Voz de Rioseco que han trasladado el malestar de algunos agricultores, vecinos e incluso ayuntamientos por la situación “de abandono y dejadez” del río Sequillo. Lo ha hecho durante una vista al Centro de Control de la Cuenca del Duero SAIH en Valladolid, acompañado por la delegada del Gobierno, María José Salguiero.
La suciedad, la maleza, los árboles en mitad del cauce y otros obstáculos son la estampa habitual del río Sequillo a su paso por Tierra de Campos, también en Rioseco, como denunció este diario. “Es claro que esta situación no ha provocado la crecida de las aguas, que en puntos como Villanueva de los Caballeros o San Pedro de Latarce han provocado el desbordamiento, pero todo ayuda. Por ejemplo, la maleza arrastrada puede provocar un tapón en uno de los puentes y provocar un serio problema”, explica uno de los afectados por las inundaciones.
Desde la Confederación Hidrográfica del Duero, por su parte, se apuesta por “no convertir los ríos en canales” y reiteran que una excesiva limpieza de los cauces, como pudiera ser un proceso de dragado, podrían perjudicar a las poblaciones, en cuanto a que el río modificara sus hábitos y pudiera producir desbordes.
No obstante, el presidente de la CHD ha recordado que en 2015, a pesar de la situación de crisis, se ha realizado “un esfuerzo inversor en materia de cauces sin precedentes con una cantidad para limpieza de 12 millones de euros”. Asimismo, ha puesto la pelota en el tejado de los ayuntamientos, también en el de Medina de Rioseco, ya que los consistorios, según Juan Ignacio Diego, tienen competencias en materia de los ríos a su paso por los núcleos de población.